lunes, 18 de julio de 2016

Educación, esa arma tan infravalorada.

Machismo, homofobia, sexismo, racismo, tortura animal, superficialidad, materialismo...
¿Qué es el causante de que estos términos sean visibles en nuestra sociedad actual? La respuesta es fácil: La educación.

Todos los que vivimos en países occidentalizados habremos vivido bajo la educación que tantos conflictos ha generado en la especie humana, a muchos de nosotros nos sonarán frases como:

"el rosa es de niñas", "maricón", "los hombres no lloran, ¿eres una niñita?", "los toros no sienten dolor", "los inmigrantes sólo traen delincuencia", y un largo etcétera.

¿Consideráis que esas frases son buenas? Pues son parte de lo que constituye la educación.

La educación es un arma muy poderosa y a su vez muy infravalorada por todos nosotros.
Muchas personas imponen sus ideas arcaicas y antiguas a sus hijos, y estos aprenden de lo que escuchan de sus padres, muchos de estos niños crecerán con ideas equivocadas sobre el resto de las personas.

Un niño algún día en el futuro odiará a su amigo musulmán con el que creció en el aula trabajando en equipo en muchos trabajos escolares.

Otro niño en un futuro golpeará a su esposa en el futuro porque "no le hizo la comida cuando llegó del trabajo".

Un niño le dará una paliza a otro niño, porque el segundo, quien estaba enamorado en secreto de él, tuvo valor para confesárselo.

Muchas niñas serán abusadas sexualmente por otros niños que crecieron con la mentalidad de sentirse superiores a sus compañeras de clase, y esas niñas se sentirán culpables porque "ellas son las que los provocan".

Un niño millonario algún día explotará a ex compañeros de clase, porque cuanto menos les pague a esos niños, más ganará él mismo.

Muchos de esos niños saborearán la violencia, maltratando animales, torturándolos o matando personas, porque en su momento, sus padres festejaban un espectáculo de tortura animal.

La culpa de muchos males de los que nos aquejamos hoy en día es culpa de la educación que recibieron nuestras generaciones en el pasado. Esa educación que todavía hoy en día mantenemos vigente con frases como las anteriormente citadas.

Nos pueden parecer frases inocentes a nosotros los adultos, adultos quienes ya hemos vivido muchas malas experiencias y que alguna vez hemos sufrido por culpa de algunas de esas "frases" que nos parecen ahora tan inocentes. Pero... ¿Y ese niño que crece escuchándote infravalorar a los gays o a las mujeres? Ese niño aprenderá eso de ti, ese niño algún día predicará con la misma ideología que tú indirectamente le inculcaste.



¿Qué veis en esa foto? Niños en general, verdad? No veis a un niño gay, ni a una niña ama de casa, ni a un niño "cristiano" o "musulmán", no véis a un niño torturador, ni veis a un niño explotador.

Pero algún día, cada uno de esos niños irá perdiendo su inocencia, se irá topando en la vida diaria con adultos que los vuelven menos inocentes y que poco a poco van deshumanizándolos. Porque cuando eres niño no miras con desprecio a tus amigos de clase, cuando eres niño sólo quieres jugar con tus compañeros y pasarlo bien, porque cuando eres niño no entiendes de raza, sexo, religión, ideologías ni tampoco disfrutas viendo a un animal morir. Esos niños algún día serán los que tengan la capacidad para lograr un mundo más justo o más injusto, y esos niños son los que hoy en día necesitan una educación que les enseñe a respetar a sus compañeros, porque al final del día, al final del curso, y al final de la vida, todos somos compañeros, todos fuimos alguna vez niños que con el paso de los años perdimos nuestra inocencia y nos fuimos deshumanizando.

Por eso la educación es tan importante, por eso cada uno de nosotros debe fomentar el amor y el respeto hacia los demás compañeros de clase, porque el día de mañana esos niños podrán transformar la sociedad en la que vivimos en una sociedad más justa, más solidaria y más pacífica en la que todos esos niños convivan unos con otros sin odio ni rencor.